Un detector de defectos magnéticos, también conocido como instrumento de inspección de partículas magnéticas (MPI), se utiliza en el método de prueba de partículas magnéticas (MT), que es una técnica de prueba no destructiva. El propósito de un detector de defectos magnéticos es inspeccionar materiales ferromagnéticos en busca de defectos superficiales y cercanos a la superficie..

En pruebas de partículas magnéticas, El material que se inspecciona se magnetiza mediante un detector de defectos magnético.. El instrumento genera un campo magnético haciendo pasar una corriente eléctrica a través de una bobina o usando un imán permanente.. El campo magnético hace que un flujo magnético fluya a través del material..

Próximo, finas partículas magnéticas, ya sea en forma seca o húmeda, Se aplican a la superficie del material magnetizado.. Estas partículas suelen estar basadas en hierro y tienen una alta permeabilidad magnética.. Las partículas se adhieren a la superficie debido a la presencia de fugas de campo magnético en los lugares defectuosos..

Luego se utiliza el detector de defectos magnéticos para evaluar la presencia de defectos.. Normalmente consta de una fuente de alimentación., unidad de magnetización, dispensador de partículas, y un medio para visualizar las partículas. El instrumento puede utilizar varias técnicas, como la magnetización continua., magnetización residual, o cambios de dirección del campo magnético para mejorar la detección de defectos.

Cuando las partículas magnéticas se aplican a la superficie., se acumulan en lugares defectuosos, formando indicaciones visibles

El detector de defectos magnéticos permite al inspector observar y evaluar estas indicaciones., proporcionando información sobre el tamaño, forma, y ubicación de posibles defectos. Esta información ayuda a evaluar la integridad y calidad del material inspeccionado..

La inspección de partículas magnéticas se utiliza comúnmente en industrias como la fabricación., automotor, aeroespacial, generación de energía, y petróleo y gas. Es un método eficaz para detectar defectos superficiales y cercanos a la superficie en materiales ferromagnéticos., haciéndolo útil para el control de calidad, mantenimiento, e inspecciones de seguridad.